ZEPPELIN ROCK: Shame (2011) - Crítica de la película

lunes, 5 de marzo de 2012

Shame (2011) - Crítica de la película




No vi Hunger, la peli anterior de este director londinense llamado Steve McQueen, a lo que pronto pondré remedio necesariamente. ¿Por qué? Porque acabo de ver Shame, de 2011, y me ha parecido una muy buena película. Y un director que es capaz de dejar terminado de manera tan perfilado un trabajo como este, pues merece una revisión. Dejaré unas primeras impresiones.


Shame nos sumerge en el turbio mundo, submundo o, mejor, intramundo (que podrá ser inframundo, entendido psicológicamente) de la adicción al sexo. No de la pornografía o del sexo como tema social, sino como problema individual, es decir, cuando una afición, una tendencia, un vicio (perdón) se convierte en una enfermedad, en una adicción, en un laberinto de Dédalo del que no se sabe (quizá del que no se puede) salir. Que interprete el final cada uno el mensaje como quiera, pero según mi opinión deja una ventana abierta a la catarsis: a un Brandon que tiene en sus manos la posibilidad de dar un paso atrás y curarse.



Como dijo Pete Travers, la película es demasiado devastadora y brutal como para resultar reconfortante. En ningún momento lo pretende el director, que, en cualquier caso, plantea el asunto con una seriedad absoluta, bien aderezado, y dota a la película de la porción de amargura suficiente. Shame (vergüenza) no es el lado oscuro del sexo, es todo un pozo de detritus del sexo personificado por el protagonista, un descenso a los infiernos en los que al amor no tiene cabida: la consciencia del amor vive en el destierro. No es una película porno, aunque esté llena, evidentemente, de escenas más que comprometidas (necesarias, claro), sino una exploración (con final algo escabroso) de ese submundo que es la convivencia continuada y enfermiza con el sexo. Esbozada así la cosa, uno puede pensar que todo derivará en una solución moral. No es así, y sin querer revelar nada, la peli tiene figura circular (círculo infernal), como una pescadilla que se muerde la cola (y no pretendo hacer un chiste). No lo es, no, pero no deja de encarnar una suerte de terapia. Ojalá, además, tenga alguna utilidad en ese sentido, pues en la sociedad en que actualmente vivimos no deja de verse como un tema candente. Lo es de hecho.

Por cierto, esa música de clavicordio, de piano, viene que ni pintada para la ambientación general de este trabajo, buena fotografía, buen guion, y los protagonistas, más aún el personaje principal, ese papel que representa Michael Fassbender, están a la altura de la circunstancias, si es que no es él mismo, el señor Fassbender, el que sostiene uno de los extremos del alto listón de esta cinta.

NOTA: 8 (y muy recomendable)


DATOS:

Director: Steve McQueen
Guión: Steve McQueen y Abi Morgan
Fotografía: Sean Bobbitt
Reparto: Michael Fassbender, Carey Mulligan, James Badge Dale, Nicole Behare, Hannah Ware

Ángel Carrasco Sotos (ACS)

3 comentarios:

  1. Pues sí, amigo Freaky, se ha iniciado mi andadura en solitario. A ver lo que me dura. De momento estoy archivando algunas entradas viejas, personales, y voy dando salida a otras cosillas que me van saliendo al paso. En fin, una nueva experience. Por aquí estaremos.

    Abrazos (la verdad es que te echaba de menos por aquí: me dije este esta despistado).

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  2. Coincido en que es un gran film. Has mencionado el cariz psicológico del personaje, creo que es la clave de la película: la psicología argumental. Lo sexual, es meramente sintomático, y el director consigue que el personaje, llegue a repugnarnos tanto como a producirnos ternura. No has mencionado la historia de la hermana, que nos ayuda a entender a Brandom. Creo que en realidad se trata de la historia de dos hermanos, y de cómo el pasado destroza su futuro.

    Gran película. Yo tampocó ví la primera de Steve, pero como tú, tras ver Shame, lo haré.

    Saludos!!

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  3. Sin duda es una peli que admite la revisión y uno se queda con la gana de volver a verla y tratar de ir uniendo algunos cabos. Desde luego invita a la reflexión. Espero esa crítica tuya para poder leerla. Gracias por acercarte y un saludo.

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