María Sergia Martín (Towanda para todos) es una eterna amiga de confidencias e intercambios literarios cuya cibernética amistad ya dura más de un año sin interrupciones (sí, compartimos amistad y a Z). Leernos el uno al otro y comentarnos nos ha mantenido unidos todo este tiempo. Gran relatista y microrrelatista, a fuerza de empujones (son suaves empujoncitos en su caso) está consiguiendo hacerse un hueco entre la pléyade de blogueros literatos que pugnan por ganarse un puesto en el Olimpo de la Internet. Sus publicaciones las puedes seguir (y es consejo de amigo, creedme) en Mi modo de ver la vida, su blog, claro. Acaba de publicar en Letralia un relato estupendo titulado "Pacto de silencio" cuya lectura os recomiendo (ahí encontraréis a la mejor Towanda). Por cierto, no se te olvide pasarte por 20Minutos para votar por su blog, que encabeza la categoría por la que se presenta. Suerte a Towanda, y gracias -ahora sí- por este relato titulado "Mal carácter", que nos ha regalado para nuestro blog. Un honor tenerla por aquí. Leedlo hasta el final, no seáis ingratos.
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sábado, 26 de enero de 2013
sábado, 24 de marzo de 2012
Cuando fui genial: La isla con Jimi
Vosotros no lo sabéis, pero yo un año triunfé y fui “genial”. Corría el soporífero curso 1990-1991 en la Universidad Autónoma de Madrid, donde junto a profesores eminentes –Diego Catalán, Antonio Rey o Domingo Ynduráin, entre otros– existían los que no pasaban de la categoría monumental de mediocres fantoches, que se ocupaban metódicamente en sus clases de que el tiempo perdiese su condición de fugitivo (tempus non fugit, escribíamos en papelotes que nos pasábamos por debajo de la mesa). Ese año terminé con un expediente académico casi impecable, que no quiere decir otra cosa sino que me pasé el año con la cabeza debajo del flexo y fiesta la justa. Claro, yo entonces creía que la vida era eso; en fin, algo decepcionante, y propio de un muchacho tirando a ceniciento o sombrío, si lo miro desde la perspectiva actual.
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