ZEPPELIN ROCK: Crítica de la película Hércules (Brett Ratner, 2014)

domingo, 2 de noviembre de 2014

Crítica de la película Hércules (Brett Ratner, 2014)


por MrSambo (@Mrsambo92)
del blog CINEMELODIC

No es mi intención insinuar que esta película es buena porque no lo es, pero claro, viendo el nivel de los péplums digitales y películas de espada y brujería que asolan nuestras pantallas en los últimos años ésta que nos ocupa casi es una rareza en su dignidad. “Conan, el bárbaro” (Marcus Nispel, 2011) nos horrorizó, las furias y las Iras de Titanes nos perturbaron, “Pompeya” (Paul W. S. Anderson, 2014) nos aburrió y durmió sin compasión, “300: El origen de un imperio” (Noam Murro, 2014) nos decepcionó enormemente… y así hasta el infinito.



Las perspectivas con esta Hércules no podían ser peores, y más cuando los personajes son planos, la trama sencilla y sin complicaciones, tópica, y no hay rasgos autorales reseñables… Pero es ahí donde supera, precisamente, a las anteriores. Su falta de pretensiones, sus pequeños aciertos y su sencillez, hacen que cometa menos errores y deje al descubierto menos tonterías… En algunos de los casos anteriores, ni la sencillez los libró de resultar ridículos…

El gran acierto y originalidad de ”Hércules” es que propone una desmitificación y humanización del legendario héroe, no sólo resaltando conflictos y tragedias personales, sino por cómo se cuenta la ejecución de sus míticos 12 trabajos, acompañado de sus amigos, otros mercenarios como él. Porque sí, “Hércules” es como “Los mercenarios” de Sylvester Stallone, pero en péplum digital.




En ese juego entre la leyenda y la verdad está vertebrada la sencilla tesis de la película, que no es en absoluto novedosa, de hecho está muy de moda este planteamiento dentro del género fantástico, pero que da un toque ligeramente novedoso a Hércules. La reflexión final sobre el heroísmo, sobre dónde radica el mismo, desde la desmitificación de la leyenda, resulta tan simple como eficaz. Un punto a favor.

No se escatima en efectos especiales al inicio, con la majestuosa, y humorística, presentación del héroe, mostrando algunos de sus trabajos de pasada respetando la leyenda, para luego descubrir cómo se forja la misma a través de relatos exagerados y cómo se las gasta Hércules en realidad. El humor es un ingrediente apreciable de la película.



La trama es sencilla, se reduce al reclutamiento de los héroes, adiestramiento de un pueblo amenazado y luego, con giro aceptable hacia el final, batallas. Por supuesto, el punto fuerte de la película está en sus escenas de acción, donde destacan dos épicas batallas y donde podemos saborear los planos generales con los movimientos de tropas, la competente lucha del grupo protagonista en planos sostenidos y flipadas varias de las que gustan a los amantes de la acción. De hecho, hay más épica en estas batallas que en el clímax, más íntimo y personalista, aunque también más flipado, cabe decir, pero con momentos intensos.

Como rasgo estilístico podríamos mencionar las grúas y travellings que Ratner utiliza al inicio de algunas escenas para presentar la entrada o reunión de algún personaje con el resto… Poca cosa, ¿verdad?




Otro de los puntos fuertes de la película es la presencia de Irina Shayk, la maciza novia de Cristiano Ronaldo.

Por lo demás, personajes planos, sin conflictos reseñables, algún trauma o anhelo fugaz sin excesivo recorrido, trama básica y sencilla que podría escribir cualquiera de nosotros, desarrollo previsible en líneas generales, y más de lo mismo a nivel conceptual y estilístico.

El reparto es muy aceptable, con grandes nombres de la escena, así podemos disfrutar de Rufus Sewell, que está estupendo en su irónico papel, Ian McShane, como visionario amigo de Hércules, o Peter Mullan, John Hurt y Joseph Fiennes como villanos ambiguos…




Mención aparte tienen los músculos de Dwayne Johnson, un personaje en sí mismos, una orgiástica reunión de esteroides que se lo pasan pipa entre sus bíceps, tríceps, deltoides, músculos de las cejas e incluso de las patas de gallo… Johnson se muestra cada vez más competente en sus trabajos e interpretaciones, mucho más que un simple musculitos con buen pulso para la comedia.

Una película que si aprueba lo hace por los pelos, pero que al contrario que los citados títulos anteriores y muchos otros no reseñados, no causa bochorno ni resulta pretenciosa… Por ejemplo, este mismo año Renny Harlin estrenó otra cinta sobre el mito de Hércules, “Hércules. El origen de la leyenda” (2014), que es un desastre soporífero. No es poco para los tiempos que corren… o quizá sí.

 ©Jorge García

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