Resurgimiento de una de las bandas legendarias del rock británico de los 70.Vuelven por la puerta grande Wishbone Ash facturando un Blue Horizon impecable con muy poco desecho, donde mezclan el rock progresivo con blues-jazz adaptándolo a nuestros tiempos de una manera fresca y renovada.
El año en que Led Zeppelin se disolvió, nació esta gran banda creativa que tuvo que mudarse a Estados Unidos, donde triunfaron antes que en su casa con su álbum mas reconocido Argus (1972), indispensable en cualquier fonoteca.
Thin Lizzy, Lynyrd Skynyrd y hasta Iron Maiden los nombran como influencias en su música y, según cuentan, fueron los inventores de las "guitarras paralelas" que tanto éxito dieron a grupos como a los nombrados Maiden y Judas Priest.
El disco se abre con una "intro" titulada "Take it Back" con tintes progresivos y con cambios de tiempo. Le sigue "Deep Blues"; como el título indica, blues clásico de alto voltaje. Luego "Strange How things..." y "Way down South" con juegos de guitarra exquisitos, melódicos y la voz de Powell en armonía. "Tally ho!!" es una gran composición con toques de jazz. "Mary Jane" no deja de ser un blues melódico con letra cursilona (si de algo pecan los Ash es que sus letras son bastante pobres). Cerrando el trabajo, "All there is to say", es la mas extensa y podría ser perfectamente firmada por el grupo de Bruce Dickinson, se va haciendo más salvaje a medida que transcurre el minutaje de la misma.
Un disco para todos los públicos. Con esto quiero decir, que si no eres un ferviente seguidor del progresivo (como es mi caso) el disco se digiere bastante bien sin producir ningún corte de digestión, sino el placer de una buena obra ejecutada de principio a fin por gente que sabe lo que hace y pone dedicación en los detalles preciosistas, elevándote al más allá sin ningún conato de orgullo o chulería, simplemente porque disfrutan haciéndolo como músicos de alta escuela que son.
©Sergio Vargas
Sensacional disco. Yo me quedé con ellos en los setenta, y la verdad, es que me arrepiento. tendré que rescatarlos a ellos y a Nazareth. Un abrazo, Ángel.
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