Posesión
Hago cosas muy raras últimamente. Nada más levantarme, me pongo de rodillas junto a mi cama y rezo durante media hora antes de ayunar. Si como algo, primero bendigo el alimento. No falto un día a misa. Evito ver publicidad pues considero que está llena de pornografía. Llevo mi crucifijo en el bolsillo y camino siempre con un cilicio amarrado que me da la vida. En verdad, parezco otra. Y si os soy sincera, creo que estoy poseída por Dios y necesito un exorcismo del Maligno.
©Ángel Carrasco Sotos
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