The Hunter
Extenuado por el hecho de actuar sin descanso, hastiado por una agenda de conciertos donde la música es lo de menos y asomándose cada vez con más peligro al abismo de su psique, Brian Wilson, en la primera de muchas decisiones ante las que su entorno será incapaz de responder con algo remotamente parecido a la comprensión, decide abandonar las giras. Estamos en 1965, el mismo año que Bob Dylan se presenta en Newport con una guitarra eléctrica echada al hombro; refugiado ahora en el estudio de grabación, el líder de The Beach Boys podrá concentrarse en las tareas de composición y producción, en depurar aquellas melodías -a veces simples sonidos- que se agolpan en su cabeza.
El primero de los tres trabajos que entregará el combo de Hawthorne ese año ve la luz el mes de marzo; su título, The Beach Boys Today!, parece querer atrapar el momento y en su primera cara, entre la contagiosa, explosiva felicidad de la relectura del clásico de Bobby Freeman "Do You Wanna Dance?" y la guitarra de doce cuerdas de "Dance, Dance, Dance" el clavicordio de la existencialista "When I Grow Up (To Be A Man)", en cuya letra un temeroso Brian Wilson se pregunta si llegada la edad adulta le gustarán las mismas cosas que disfrutó siendo niño, nos prepara para una segunda cara concebida como una sinfonía pop de cinco piezas.
De una sensibilidad y vulnerabilidad inéditas hasta entonces, son cinco baladas que gravitan en torno al misterio del amor y de las relaciones humanas dejadas atrás las certidumbres de la infancia. De belleza inmarchitable, auténtica música del alma, sin "Please Let Me Wonder", "Kiss Me, Baby" o "In The Back Of My Mind" -en esta última, oboes y campanillas de juguete, lo sinfónico y lo atonal, se conjugan para derrumbar los muros del convencionalismo- no existiría Pet Sounds. Primer jaque a sus competidores musicales, con The Beach Boys Today! Brian Wilson se hizo mayor y con él la música popular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario