ZEPPELIN ROCK: STRANGER THINGS ¿son los 80?: Nostalgia y otras mandangas de una serie

sábado, 23 de julio de 2022

STRANGER THINGS ¿son los 80?: Nostalgia y otras mandangas de una serie





Puede pasar. ¿A quién no le ha pasado que una noche de verano, volviendo a casa de jugar al julepe en la tasca del pueblo con los amigos, te secuestre un monstruo que parece salido del tubo de escape de un Simca 1100 con el carburador trucao? Que sí, te pasas una temporada en el inframundo y te salvas de chiripa, pero Will, tío, que un año después se te mete el monstruo dentro. Y otro año después te persigue un Kebab gigante con patas. Will, espabila, que te salen babosas de la napia y te quedas callao como una perra. Un cenizo el Will.



Stranger things tiene que molar sí o sí. Son tantas las referencias que algo tiene que tener que te guste. Es como esas pizzas con doscientos ingredientes en el que alguno tiene que gustarte. Lo de juntar piña con anchoas ya es otra cosa, pero Stranger things es lo que tiene. No recuerdo los años 80 tan molones como en la serie, pero claro, es que cuando se habla de nostalgia ochentera nunca aparecen las hombreras, la Movida y los Modern Talking y así, claro, es más fácil. Desde luego en el género fantástico las meten todas, las referencias digo, aunque que un chaval americano tenga colgao en su cuarto un poster del Filth hounds of hades de Tank es pasarse de fantasía. La Cosa, Goonies, Conan, Indiana, Pesadilla en Elm Street, cualquier peli de zombies, Cazafantasmas, El Silencio de los Corderos (hey, Duffers broders, que esa era de 1991) Gremlins, Cujo, Polstergeist, Los chicos del maíz, Critters y hasta Terminator (incluso La Colmena de Cela por la cantidad de personajes y sus dramitas) Está TODO. Es como Wolfmother con el rock de los setenta: lo copi... homenajean todo. Y oiga, como entretenimiento lo bordan. Claro que con sus agujeros de guion, que se perdonan, aunque algunos sean graves como que un Jebi venda drogas y juegue al rol. Por ahí no, Duffers, o pasabas costo o jugabas al rol, las dos cosas no podían ser. Lo de los recreativos sin peste de Ducados y manguis everywhere debe ser en los USA por aquí también era imposible. Pero bueno, se perdonan todas estas cosas, al fin y al cabo es una puta serie de Netflix. Lo que mata la serie, en mi opinión es en ansia de vender, en “contrimásmejón”. Hombre, que todos los años monstruos deberían abrir la mente a más de uno, ¿eh, Will? El humitos, el kebab, los cara coliflor, el Eddie de los Maiden... se barrunta que en próximas temporadas va a aparecer Gozer el Gozeriano en su versión Marshmallow.

 


Así que sí, la primera temporada es perfecta en lo suyo, pero la cosa acaba cansando y al final la serie termina siendo Al Salir de Clase, pero con monstruos. Eso sí, otro punto positivo es el uso del humor en dosis moderadas y no como las mierdas esas de Marvel que veis. Aquí no se hacen chistes cuando hay un puto cara coliflor persiguiéndote o cuando el Vecnaeddie te hace una luxación de muñeca de grado 5.

 


Stranger things es la perpetuación de los años 80. Cuando nosotros los ochenteros verdaderos estemos muertos, habrá un nuevo revival de los años dosmildieces y entonces Stranger things será un clásico para nostálgicos de la nostalgia. Esa serpiente nostálgica que se come su propia cola nostálgica incluso podría ser uno de los futuros monstruos en las próximas temporadas, ahí los dejo, Duffers broders.

No hay comentarios:

Publicar un comentario