ZEPPELIN ROCK: Jeff Lynne's - Alone In The Universe (2015): Crítica del disco Review

domingo, 22 de noviembre de 2015

Jeff Lynne's - Alone In The Universe (2015): Crítica del disco Review



Antes de entrar de lleno en el disco con la intención de esbozar al menos una somera crítica de su contenido, conviene aclarar que Alone in the Universe (vía Columbia Records) no es un disco, como parece proclamar el señor Jeff Lynne (y así consta en la Wikipedia), de la Electric Light Orchestra. La ELO fue fundada por Lynne junto con Bev Bevan y Roy Wood en 1970 y ninguno de esto últimos toman parte en este -vamos a decirlo ya- fenomenal trabajo. Tampoco figura Richard Tandy, quien faenara codo con codo con Lynne desde el segundo disco de la banda, del 73, hasta ese Zoom, último álbum, editado hace ya 28 añazos. Tampoco el resto de los músicos que consiguieron que la ELO tuviese su esencia propia haciendo cada uno su pequeña o gran aportación. 


Para decirlo de una vez, Alone In The Universe es un disco de míster Jeff Lynne en solitario. Tal cual. Él escribe todas y cada una de las canciones, pone la voz (salvo en coros que escuchamos de fondo en alguno de los temas: óigase a tal propósito "Love & Rain") y toca todos los instrumentos. Se ve que Lynne piensa, como Cela, nuestro Nobel, que "el trabajo en equipo suele ser la muleta de la mediocridad compartida y la patente de corso de la holgazanería".

En cualquier caso, tampoco es la primera vez que Lynne se sirve del nombre de la legendaria banda para lanzar un trabajo en solitario como lo es este de todas todas. Recordad que en 2012 salió al mercado un recopilatorio con lo mejor de la ELO con el nombre Mr. Blue Sky: The Very Best de Electric Light Orchestra, que se "vendió" como temas nuevamente grabados; sí, grabados por él solito, puros remakes facturados por Lynne. Nada que objetar para uno, al que le dan lo mismo estas movidas del corazón si el resultado es bueno. Y lo es. El resto simplemente es, como digo, puro cotilleo rosa y asunto, si se tercia, de los tribunales, cosas en lo que uno ni entra ni sale. ¡Allá clavículas!, como dice uno de mi pueblo. 

Lo que observamos en Alone In The Universe es esencialmente un disco que, aunque no lo sea, sí que parece producto de la misma ELO, y es aquí donde evidentemente podemos observar las influencias más claras de lo que se ha cocinado en él, un rancho con estrella Michelín, sin desdeñar influjos (como los hubo en los discos clásicos) de Beatles, Lennon (este llamó a ELO "los hijos de los Beatles" en una entrevista), Dylan, Petty (escuchad "Ain't it a drag", en la que veo también toques Beach Boys), Orbison (remito a "I'm Leaving You") y concomitancias con el Bryan Adams que bebió en parte de la fuente eléctrica de esta orquesta, con Chris Rea (jolines). Ecos, clasicidad, compases reconocibles, sabor añejo, olor a buen café con unas gotas de ron de caña. Pop remozado, fina psicoledia, nostalgia, frescura.

Aseguro que escuchando el disco a mi mente llegan imágenes de Lennon (cuando comienza "When I Was a Boy" parece que su voz va a surgir como por encanto para deleitarnos con una versión propia de "Imagine"; por no hablar de "All My Life", otra balada a lo Lennon), Tina Turner (¿no la reconocéis en "Love & Rain"?), Asia (sí, del último Asia: "Dirty To The Bone" es un ejemplo más que evidente si suprimimos algunos efectos con fondo de gorgoritas; y de igual modo sucede en los compases de la siguiente "When The Night Comes", que cabalga sobre unas bases reggae)...pero, como decimos, son sobre todo viejos y conocidos temas de la ELO los que en el disco parecen recrearse en parte: "One Step At A Time" recuerda a "Showdown" (On the third day, 1973), por ejemplo. 

En fin, un álbum que suena a clásico, en el que uno parece revivir aquel rock adolescente, cuando se iba haciendo a sí mismo (¡qué bien entra esa sedosa "I'm Leaving You"! o el bonus "Blue", que nos trasladan a ese antaño del rock radiofónico y sesentero), un disco con etapas bailables y momentos relajados y muy líricos, en el que resalta la armonía con que se han mezclado los instrumentos. Y con una maravillosa manera de culminarlo con el hipnotizador, electrónico y cósmico "Alone in the universe", un tema cautivador que enamora por sus dejes de solitaria melancolía.

Un aconsejable disco, en definitiva, que estará sin lugar a dudas en mi top ten de este 2015, en el que su autor vuelve a los orígenes facturando composiciones dignísimas que dejan claro que a Lynne aún le quedaba cuerda (¡con la de falsas expectativas que siempre levantan estas viruelas a la vejez!) y tiene muchas cosas que contarnos: si lo hace con tonadas como estas, más que agredecidos quedamos.


ÁCS-ZRS

1 comentario:

  1. Buenas tardes Ángel:
    Soy un fan de la ELO de los de toda la vida y sieempre será uno de mis grupos favoritos.
    Ayer me descargué el álbum y después de dos audiciones completas, a primera escucha me ha parecido una preciosa recopilación de baladas, pero he echado en falta la chispa de algún tema con la fuerza de antaño, no ya sólo en la voz(los años no pasan en balde), sino también en lo instrumental.
    No obstante, para mí, JEFF LYNNE siempre será uno de los grandes genios de la música del siglo XX y comienzos del XXI.
    Y te doy las gracias por tu magnífico análisis, que una vez leído me estáa ayudando a saborear y valorar este trabajo mucho mas (pues al principio me pareció demasiado "plano").

    Atentamente
    Juan Ignacio Amador

    Saludos desde Fuengirola (MÁLAGA)

    ResponderEliminar