Microrrelatos - Basura Espacial (82): Junto al muslo más o menos

Junto al muslo más o menos

POSIBLEMENTE ése no era un sueño común. Desde hacía más de diez años soñaba siempre con una muchacha a la que nunca había visto y de la que poco a poco se había ido enamorando. Se trataba de un rostro desconocido y que a lo largo de su vida onírica no había cambiado un ápice: era joven, sin duda, muy morena, de ojos verdes, de rasgos faciales marcados, pero también era amable, risueña, con una risa que casi rimaba con sus curvas y con sus dedos largos que terminaban en unas uñas pintadas, siempre de color negro. Como un milagro fue que un día tal chica apareciese sentada junto a él en el autobús que lo llevaba a Córdoba. La conversación al principio fue titubeante, pero prosiguió fluida hasta que, después de un tiempo, se tocó el punto clave y él, aún tembloroso, reveló su secreto, algo que a ella le llenó de un júbilo imposible, pues a ella, Nati (ese era su nombre, como en el sueño) le había ocurrido lo mismo: él era el hombre de sus sueños. Tal reciprocidad feliz terminó en una habitación de hotel. Fue allí cuando él, Rafa, que había estado ciego, comprobó algo sospechoso rozándole el muslo. Una revolución fantasmagórica barrió el entramado de su cerebro.

©Ángel Carrasco Sotos

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