ZEPPELIN ROCK: Nick Cave & The Bad Seeds - Push The Sky Away (2013): Crítica del disco

lunes, 11 de febrero de 2013

Nick Cave & The Bad Seeds - Push The Sky Away (2013): Crítica del disco


por Don Críspulo


Ahora que todo el mundo es fan de Nick Cave desde antes de que este formara The Birthday Party, es interesante pasearse por las críticas y reseñas que los medios hacen del nuevo disco del australiano. Como esa de Elpais.es donde nos cuenta que Push The Sky Away es el disco “más sereno de la bestia”, como si la bestia no hubiera forjado su leyenda con serenos discos de la talla de Murder Ballads, The Boatman´s Call o el serenísmo de verdad de la buena, y por otra parte incomprendido, Nocturama. En fin, son cosas a las que uno no se acostumbra a pesar de tener ya percebes en los cojones.


La carrera de Nick Cave, y esos Bad Seeds que le acompañan, es cualquier cosa menos aburrida; cada disco es una sorpresa, un “a ver por dónde sale”, con personalidad propia. No hay dos iguales, no hay nada predecible y este no iba a ser menos. Ese arte de hacer un discurso de cada canción y una letanía de cada discurso aquí se acrecienta más que nunca. En lo musical todo suena como si de una sola canción se tratase, sin sobresaltos, sin cambios de ritmo o sonido. No hay arreones como en Dig, Lazarus, Dig ni paleta de colores como en el aclamado Abbatoir Blues/ Lyre Of Orpheus. Aquí todo sigue el mismo tono, el mismo formato uniforme, y funciona de maravilla. No solo no cansa, sino que que a medida que uno se adentra en ese falso minimalismo que parece a primera vista, se da cuenta de que, además de un disco complejo y lleno de detalles, es un disco buenísimo. Imposible no quedarse atrapado en la belleza de “Wide Lovely Eyes”, con ese machacón reloj y esa letra ... You wave and say goodbye o la poesía de “Mermaids” I believe in God I believe in mermaids too...

Push The Sky Away es una obra para perderse en los detalles, en las imágenes, en aquel piano o aquella voz femenina que no oíste la primera vez, en las letras recitadas como un mantra. Un disco que parece reinventarse cada vez que lo escuchas, donde, como en un viejo truco de magia, nada es lo que parecía ser. Un disco para volver a hacer las paces con la música.

I am alone now
I am beyond recriminations
Curtains are shut
Furniture has gone
I'm transforming
I'm vibrating
I'm glowing
I'm flying
Look at me now
I'm flying
Look at me now

Escúchalo AQUÍ
©Don Críspulo

2 comentarios:

  1. ¿Más sereno que Nocturama? No sé... habrá que oírlo de principio a fin. Las canciones que yo he podido escuchar están en la línea, eso sí, de su etapa más relajada. Lejos de su último álbum y de lo hecho con Grinderman, desde luego.

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  2. No, más sereno noooooo. Yo no digo eso, eso lo dice el fulano del ELPAIS. Más sereno que Nocturama sólo si es el silencio.
    A mí, que soy fan, me ha gustado muchísimo el disco pero también me gustó muchísimo Lazarus.

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