ZEPPELIN ROCK: Microrrelatos - Basura Espacial (66): Mis padres

sábado, 16 de febrero de 2013

Microrrelatos - Basura Espacial (66): Mis padres



Mis padres

Para  Towanda

MIS padres todo lo que hacían era por mi bien (de hecho he llegado a pensar que vivieron por mi bien). Trabajaban y ahorraban por mi bien. Me ayudaban a hacer los ejercicios escolares por mi bien. Me hacían recogerme temprano a casa los días festivos por mi bien. Me prohibieron fumar y beber (todo tácitamente) por mi bien. Me pagaron clases de repaso, de apoyo, de mecanografía, de solfeo, de inglés por mi bien. También me pagaron estudios universitarios por mi bien.

Ellos ahora son ancianos y mi bien, resultado de tales esfuerzos y sacrificios, ha sido aprobar a la postre unas (duras) oposiciones de funcionario de prisiones (y tocar la flauta los domingos a eso de las doce); es un trabajo (el de la cárcel y, casi en idéntica proporción, el de tocar la flauta) que me deprime cada día, aunque he de decir que empecé con optimismo (en ambos casos). Algunos dirán que mi bien no está del todo mal y que me quejo de vicio. Pero no sé, no sé. No sé; tan sólo se me ocurre eso mientras soplo sin parar esta maldita flauta travesera.

©Ángel Carrasco Sotos

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5 comentarios:

  1. Jajaja, aún así -estará de acuerdo conmigo- los padres -la mayoría, al menos- intentamos el bien de nuestros hijos siempre. Claro que la vida, en ocasiones, es cabrona.

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    1. Cuando dice la vida se refiere a los hijos, jaja, todos lo fuimos, corremos a contracorriente (la mayoría) del deseo de nuestros padres, al menos en nuestra juventud (bendito tesoro). Luego vienen los arrepentimientos y todo eso y uno se pone a sacarse el graduado por las noches y a ir a misa, jaja.

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  2. Hola Ángel.
    Un microrrelato dedicado, ¡guaaaaau! Gracias, bonito.

    Así pretendemos ser los padres para nuestros hijos aunque, en ocasiones, no lo sepamos hacer del todo bien.

    Me da mucho que pensar este cuentecillo porque creo que -la mayoría- pensamos más en nuestra prole que en nosotros mismos.

    A este chico, el del relato, que ya debe de tener unos añitos (lo digo por lo de la mecanografía; disciplina que se aprendía en el siglo XX) le animo a que se anime. ¡Es funcionario y toca la flauta! ¿qué más quiere? Algun@s solo tocamos la flauta a ver si suena algo; mientras otr@s tant@s solo somos funcionari@s... Creo que se queja de vicio.

    Estupendo relato. A ver si Z aprende algo del flautista triste y se pone a estudiar que, por lo que veo, va a ser una petarda toda la vida.

    Besos.

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    1. Lo prometido es deuda, querida amiga (todo esto es parra que Z vea que no nos llevamos tan mal).

      Nunca estamos conformes con nada y siempre pensamos que quizá nuestra vida hubiese ido "mejor" si hubiésemos tomados otros derroteros. Ganas de marear esta perdiz que nos consume. De todas formas sigo una máxima: no me fío de nadie que me dice que hace las cosas por mi bien (a no ser que sean tus padres; ¡oíste, Z!)

      Un beso.

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    2. Tampoco me fío al cien por cien de los que hacen las cosas por mi bien; ni de los que por mucho que me quieran me hagan llorar; ni de esas letras que con sangre entran; ni de los que aprendieron mecanografía... jajajaja (bueno, de los últimos sí).

      Feliz finde.

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