ZEPPELIN ROCK: BRIAN FALLON - Local Honey (2020): CRÍTICA Review

jueves, 30 de abril de 2020

BRIAN FALLON - Local Honey (2020): CRÍTICA Review


por Alberto Iniesta (@Radiorock70)
del blog Discos




Le tenía muchas, muchísimas ganas, al nuevo disco de Brian Fallon, este Local Honey. Sleepwalkers fue uno de mis discos favoritos del 2018; resultó un auténtico vendaval de energía y optimismo que puso banda sonora a momentos buenos y no tan buenos. Soy consciente de que algo de ese calibre no puede decirse de cualquier disco: que un LP se quede a vivir en tu mundo y te haga compañía en momentos grises y no tan grises es, con total seguridad, lo más bonito que se puede decir de esa banda o artista en cuestión, aparte de constituir uno de los motivos principales por los que escuchamos música.



Recapitulando -que se me va la cabeza-, el caso es que esta nueva entrega de Brian me hacía mucha ilusión, y lo he tenido puesto a fuego lento durante estas semanas que han transcurrido desde que salió a finales del mes pasado. Evidentemente, si eres muy fan de los Gaslight Anthem y lo tuyo no es la americana ni el folk, lo mejor será que no escuches el disco. Porque, ante todo, supone un cambio de tercio importante con respecto al mencionado Sleepwalkers. Donde en el anterior LP hubo furia con canciones como Watson o Forget Me Not, ahora tenemos la calma de 21 Days o I Don’t Mind If I’m With You. ¿Significa eso que The Gaslight Anthem no volverán a juntarse encima de un escenario? Más allá de análisis radicales y catastrofistas sin sentido, lo que eso significa es que Brian Fallon es un tipo inquieto musicalmente hablando, que simple y llanamente hace lo que le viene en gana. Quien tenga ganas de tralla, que coja el American Slang y suba el volumen.

La mano de Peter Katis en la producción es gloriosamente sencilla, consiguiendo de manera exitosa que las canciones respiren y fluyan con total libertad a lo largo de la media hora escasa que dura el LP. Es inevitable pensarlo: ojalá Devils and Dust y Western Stars sonaran igual que este. Con ello no quiero decir que estemos ante la obra maestra que se comenta en muchos análisis del disco que circulan por ahí; me refiero, única y exclusivamente, a que este Local Honey consigue algo que muchísimos artistas ambicionan y que no resulta en absoluto sencillo: que menos sea más.




Canciones como la inicial When You’re Ready suponen un intento de consejo amable y positivo para cualquiera, en especial cuando desemboca en el estribillo donde Brian canta eso de “when you’re ready to choose someone make sure they love you”, aunque como bien explicó hace poco el músico, a veces en la vida hay que dejar que la ola te golpee aunque duela. Hablando de dolor, 21 days sobrevuela por esos momentos difíciles al perder a una persona especial en tu vida, con las charlas alrededor de un café que ya no volverán. Siendo realmente complicado expresar más con menos, esa canción es un triunfo minimalista absoluto. Vincent viene a recordarnos que, en más ocasiones de las que nos gustaría reconocer, hemos preferido una mentira amable antes que una verdad dolorosa cuando canta “say that you miss me, sweet little lies”. Es cierto que quizá la sensación de encontrarnos ante un disco algo monotemático está ahí, pero en este caso creo que la forma de contarlo y cantarlo justifica los medios, por amorosos que sean. I Don’t Mind If I’m With You, precisamente, es una de las canciones más cálidas y moñas que podemos encontrar en el disco, pero la letra es tan real que puede llegar a doler en algunos momentos. Horses utiliza un precioso y eterno símil entre los caballos y la libertad cuando canta “and in my chains I saw us running free as all the pretty horses in my dreams”, puro sueño de libertad que no siempre vemos cumplido. You Have Stolen My Heart se encarga de clausurar el disco a lo grande, con una letra que transita entre el deseo de que la vida sea sueño (“I could swear that I knew you before”) y el miedo de que los sueños no sean nada más que eso: sueños (“One day I’ll wake up and you’ll be a dream”).

2 comentarios:

  1. ahhhh,este es el trobador de New Yersey,amigo y emulador de Bruce Springsteen.......buen rollo Alberto....

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    1. El que salió a cantar No Surrender con el Boss en la gira del (juraría) Working On A Dream, pero lo que hace es mucho más que un copy paste de Springsteen

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