ZEPPELIN ROCK: Crítica de "Operation Avalanche" (2017, Matt Johnson): Review

domingo, 14 de mayo de 2017

Crítica de "Operation Avalanche" (2017, Matt Johnson): Review


por MrSambo (@Mrsambo92)
del blog CINEMELODIC

Que en 1969 no llegamos a la Luna lo sabemos todos. Todo fue un montaje dirigido por Stanley Kubrick, que aprovechó sus contactos con la NASA para crear la película con los mejores efectos especiales y que usaba para 2001: Una odisea del espacio (1968).

Sobre esa teoría conspiranocia realiza Matt Johnson este falso documental, que plasmaría en imágenes esa seductora idea con todos los elementos que se cuestionaron y pusieron encima de la mesa, presencia del mismísimo Stanley Kubrick incluida. Aunque no sea él el director.



Y es que más allá de esa atractiva idea, la película tiene los defectos habituales de este tipo de propuestas, pero logra incluir alguna idea interesante.

Operación Avalanche, más que cualquier otra cosa, es la sentida reivindicación del cine como vehículo de viaje, como medio que hace realidad los sueños, que todo sea posible. Es el cine quien nos lleva a la Luna y a donde queramos.

Es por ello que los homenajes cinéfilos son numerosos. Ahí tenemos el inspirador vídeo de Viaje a la Luna de Méliès que ve el protagonista y los pósters de grandes clásicos que decoran las paredes de su despacho. Lawrence de Arabia, Lolita”, Vidas rebeldes, El desprecio, Doctor Zhivago, Anatomía de un asesinato, El extraño, ¿Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú




Pasearemos por el set de 2001: Una odisea del espacio y veremos a un jovencito Kubrick, lo que hace el momento y la idea tremendamente sugerentes. Un rodaje que inspirará el plan, basado en las técnicas de Kubrick con la “Proyección frontal mediante pantallas”.

El tono de la película se va oscureciendo con habilidad. Si bien comienza como una especie de comedia, donde un grupo de agentes, que más parecen unos gamberros juerguistas de fiesta, diseñan un plan para hacer creer al mundo que Estados Unidos ha sido la primera en llegar a la Luna ante la imposibilidad de acometerlo realmente.

La película es ágil y la trama atractiva, como no podía ser de otra forma al poner en imágenes una de las teorías de la conspiración más famosas de todos los tiempos. Y se ve bien a pesar de la papada y la boca del protagonista, Matt Johnson.




El gran problema es que, como suele ocurrir con estas propuestas pseudo documentales, su puesta en escena es tremendamente artificial, lo que provoca justo lo contrario de lo que pretende: falta de credibilidad.

La planificación de video casero y cámara al hombro pretende verosimilitud, naturalidad y realismo, pero incomoda al espectador con ese ajetreo de cámara. Además, a menudo resulta incoherente con grabaciones en determinadas situaciones, sin sentido, provocando, como comento, el efecto contrario.
Aquí hay muchos ejemplos de esa incoherente puesta en escena y planificación. Planos espía absurdos, donde no se entienden los encuadres estando ellos solos (se entiende que se escondan cuando aparecen personajes ajenos al grupo, pero no estando ellos solos), momentos de grabación sin sentido, montaje tramposo, con cortes que sólo pretenden significación dramática, contraplanos de cámaras que no vemos en el plano anterior… Planos reflexivos que tampoco son naturales en la intimidad de un personaje, que sólo tienen la intención de enfatizar emociones o generar cebos…

Desenfocados, textura sesentera, movimiento arbitrario de la cámara al hombro, errores de edición y sonido para dar verismo, imágenes documentales reales… La ambientación está muy conseguida, lo que es uno de sus puntos fuertes.




Hay que destacar la magnífica persecución en coche, sin corte y desde el punto de vista subjetivo del cámara que acompaña al protagonista. Otra de las virtudes es que podemos escuchar varias veces a la Creedence Clearwater Revival.

Interesante, entretenida, tópica en su paso al thriller, que si bien está logrado en su evolución desde la aparente comedia, es poco original. Sin ser nada del otro mundo tiene una idea sugerente y se ve del tirón. Buena opción para cualquier noche.

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