ZEPPELIN ROCK: Georges Méliès y la magia del cine

jueves, 29 de agosto de 2013

Georges Méliès y la magia del cine


por Fabián Castillo Molina



Hace unos días comentaba mi sorpresa ante el silencio de los medios de comunicación, sobre un nombre, Emilio Ruiz del Río, quien había contribuido con su grano de arena, con su ingenio y su magia, al desarrollo del cine, y no solo del cine español. Decía que había participado en más de 500 películas y su vida y obra habían sido por fin recogidos de manera especial en el documental El último truco, de muy recomendable visionado.



Pues bien, ayer pude ver en Madrid la interesante y extensa exposición sobre “Georges Méliès (1861-1938), dibujante, mago, director de teatro, actor, decorador, técnico y también productor, realizador y distribuidor de más de 500 películas entre 1896 y 1912. Reinó en el mundo del género fantástico y el trucaje cinematográfico durante casi veinte años y su contribución al séptimo arte fue fundamental: introdujo el sueño, la magia y la ficción en el cine, cuando este se hallaba aún en sus inicios y era casi exclusivamente documental. El acto fundamental de Méliès consistió en combinar el universo de Robert-Houdin y la cinematrografía de Marey y de los hermanos Lumière”. En el tríptico que se entrega con la entrada aparece el comentario anterior entrecomillado y destacan la genialidad de este otro hombre de cine, cuyo trabajo incansable produjo un avance tan significativo en este medio, que cien años después es motivo de exposiciones y muestras itinerantes por grandes ciudades, exposición que si tenemos ocasión merece ser visitada.

Con La invención de Hugo, (2011), Martin Scorsese rendía un precioso y merecido homenaje a este mago del cine. La película es un complemento perfecto de la exposición y todo aficionado debería verla.





En ella, se recoge también un homenaje a otro mago del humor del cine mudo, Harol Lloyd y la conocidísima y admirable secuencia del reloj en El hombre mosca (1923).




¿Y todo lo anterior para qué? ¿Solo por la curiosidad de las 500 películas? No. El motivo es resaltar lo que un apasionado por algo que parece un juego de niños puede llegar a hacer en los años de vida que le toque vivir y, de paso, recordar que en estos tiempos de crisis parecida en lo larga y profunda a las peores que se conocen, conviene a todos estar atentos a los movimientos de tropas y aires de nueva invasión y destrucción de un país que hasta hace poco tiempo vivía en paz y equilibrio con el mundo. Pensar si podríamos hacer algo, poner nuestro grano de arena por evitar una tercera guerra mundial. No estará demás echar un vistazo al contenido del vídeo incluido en el siguiente enlace:



Y si es posible interesarnos cuanto de verdad y mentira hay en la información masiva que nos llega a través de los canales de máxima difusión.

©Fabián Castillo Molina

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