ZEPPELIN ROCK: ROOKIE - Rookie (2020): CRÍTICA Review

jueves, 11 de junio de 2020

ROOKIE - Rookie (2020): CRÍTICA Review


por Alberto Iniesta (@Radiorock70)
del blog Discos



Bloodshot Records es una discográfica más que recomendable, y lanzamientos como este sabroso debut de los Rookie no hacen más que confirmarlo. El disco suena todo lo fresco que puedas imaginar, como si cada surco del LP te transportara de inmediato a las aguas de una playa paradisiaca. Es posible que los Rookie no puedan catalogarse como una banda al uso, por aquello de que haya tres tipos a las seis cuerdas y no exista la figura de un único frontman a la voz. En cualquier caso, ¿a quién le importa eso? Lo que está claro es que estos tipos, sin hacer un disco que vaya a revolucionar el rock, se han sacado de las guitarras un artefacto muy adictivo que será imposible escuchar solo una vez.



Cuando el LP concluye parece evidente que estos chavales se han pasado horas mamando los Revolver, Sweetheart of the Rodeo, Fresh o Radio City, pero sobre todo se agradece que el sonido del grupo no sea simplemente el resultado de esa peligrosa combinación del control c y el control v. En definitiva, se trata de un disco hecho por y para amantes del power pop, sin más pretensiones que la de disfrutar. Y vaya si se disfruta con este debut.

Tanto cuando pisan el acelerador en canciones como la que abre el disco, Hold on Tight, como cuando la pausa se viste de protagonista en I Can’t Have You But I Want You, el resultado es el mismo: la sonrisa se mantiene firme independientemente de los decibelios. Mientras que la primera borda su papel de cañonazo diseñado para arrasar con todo lo que esté a su paso, brillantes solos incluidos, la segunda saca las garras para sacar a la luz una de las armas decisivas del grupo: el excelente uso que hacen del pedal steel. Por otra parte, temas como Elementary Blues opositan con sólidos argumentos a ocupar un lugar privilegiado en la memoria de quienes la escuchen. Side of the Road, nada que ver con la canción de Lucinda Williams, desprende un brillo a mitad de camino entre lo misterioso y lo peligroso que te empuja por cada una de sus estrofas hasta caer rendido ante el estribillo.



No resulta complicado imaginar a One Way Ticket como una firme candidata para arrancar un show en vivo del grupo, porque es de esas canciones idóneas para empezar una fiesta, y al fin y al cabo eso son nuestros añorados conciertos: fiestas, celebraciones de música con la vida de fondo, celebraciones, fiestas de la vida con música de fondo. Qué más da el orden, si al final estamos hablando de lo mismo. Mil perdones, pero tengo que dejar de escribir para volver a gozarme este disco otra vez. Los que lo hayáis escuchado me entenderéis mejor. ¡Larga vida a los Rookie!


I Can’t Have You But I Want You

Elementary Blues

One Way Ticket

2 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Suenan a gloria la verdad. Ojalá lo puedan mantener, o incluso mejorar, en futuros discos

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