ZEPPELIN ROCK: BRITNY FOX - Britny Fox (1988): Crítica review

sábado, 7 de septiembre de 2019

BRITNY FOX - Britny Fox (1988): Crítica review


por Rockología (@RockologiaTwit)
del blog Rockologia




Quizá lo sepáis. En el apogeo del hard rock ochentero, donde los éxitos de bandas como Motley Crüe o Whitesnake animaba a las compañías de discos a rebuscar cualquier cosa que se pudiera maquillar, Britny Fox contó con la amistad de Cinderella: la banda de Tom Keifer hizo de celestina para que estos cuatro consiguieran un contrato con la CBS.




De la producción se encargó John Jansen, ingeniero de largo historial (asistente de Eddie Kramer) y que también produjo discos para Cinderella o Bang Tango.

La banda la formaban “Dizzy” Dean Davidson como cantante, guitarrista y principal compositor, Michael Kelly Smith como guitarrista (anteriormente en Cinderella), Billy Childs al bajo y Johnny Dee a la batería (anteriormente en Waysted).




El disco abre con un tema puro hair rock, Girlschool, una mezcla estupenda de melodía y ritmo, con letra y estribillo sencillos, mostrando la tónica del álbum. Fue el primer single. Después nos metemos en tres temazos, lo mejor del disco a mi gusto. Primero aparece Long way to love, con un trabajo de guitarra muy bueno y “Dizzy” en plena forma. Kick and fight es una canción ganadora por su estupendo tempo y las armonías vocales. La consabida balada que todo álbum de la época debía poseer se titulaba Save the week: canción romántica que combina la fuerza roquera con la miel necesaria para conseguir un temazo.

El resto de canciones no desmerecen, sobre todo Fun in texas, con un toque blues curioso, la sencillez de Rock Revolution (¡qué pegada!) o la final Hold on. Mención aparte merece Gudbuy T’Jane, extraordinaria versión del tema de los Slade (y gracias a esto cotilleé por primera vez en la discografía de esta banda).


El álbum llegó a despachar un millón de copias y la banda se curró más de cien conciertos en año y medio. En 1989, deprisa y corriendo, se editó el recomendable Boys in heat. El amigo Dizzy decidió cambiar de aires y dejó a sus compañeros con la banda, quienes aguantaron un disco y un par de años más. La banda se ha juntado en varias ocasiones sin ningún éxito. Una lástima que no dieran más de sí; este disco es fabuloso.

2 comentarios:

  1. Nunca me acabaron de gustar. Tom Keifer tiene un talento increíble y si se libró del guitarrista sería por algo. Siempre me parecieron una triste copia wannabe de Keifer & co. Aun y así, le daré una escucha con talante nostálgico.

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    1. Pues sin ser nada del otro mundo ni resultar demasiado originales, la verdad es que el disco es más que aceptable y resulta muy entretenido. ¿Será que con la edad se educa el oído y se curan los prejuicios? ;P

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