Los 10 mejores guitarristas que nunca salen en las listas - Las más altas cotas de la cultura universal

NOTA PREVIA: Si usted piensa que “esto” es tocar la guitarra y no un mono de circo, no siga leyendo.

by Don Críspulo

@DonCrspulo

Tuve la suerte, hace años, de ver a Joe Satriani en directo. Huelga decir que pocas veces he visto tocar la guitarra con tanta técnica como lo hizo aquel hombre, pero era eso, era eso y nada más (aléjate, Poe). La verdad es que me aburrí como una ostra.

Y la vida es así, hay que ser “el que más” (fuera de aquí, Fortu), Citius, Altius, Fortius, coñazus, como si de una gran competición se tratara. Pero no amigos, ni Vai ni Vanderberg juntos superaron, excepto en laca, al tandem Marsden/Moody, ni el pobre de Malmsteen ha conseguido sacar al mercado un disco que se acerque a cualquiera de los que sacó Blackmore con sobredosis de pentatónicas en Rainbow o Purple. Y no obstante esas listas de los mejores guitarristas siempre premian a lo mismo, y yo no lo voy a discutir, pero déjenme que reivindique a unos que casi nunca salen y son mucho mejores que la mayoría de ordeñamástiles que todos tenemos en la cabeza. Podrían ser otros, hay miles, pero hoy son estos y son buenísimos. Casi todos son muy conocidos, pero poco reivindicados así que lo hago yo.

Los mejores guitarristas olvidados (en las listas):

Andy Latimer. Todos conocéis a Camel así que no me extenderé mucho. Latimer es un fuera de serie sin más aspavientos que sus dedos. Siempre me ha parecido muy injusto que nadie reclame para él, excepto en algunos círculos, un puesto de honor entre los mejores guitarristas. (Pincha en el enlace si no puede verlo aquí).

Alex Lifeson. Sólo viendo el buen gusto que tiene para las guitarras (y cómo nos las restriega por la cara en cada concierto) ya podemos hacernos una idea. Un maestro con los riffs arpegiados. (Pincha en el enlace si no puedes verlo aquí).

Rory Gallagher. Mi guitarrista favorito de todos lo tiempos. Devoción. Una técnica pulcra y cuidada al servicio de un salvaje. El mundo es muy injusto con este hombre. (Sí, soy un llorón)

Neil Young. Alguno ya estará llevándose las manos a la cabeza y puede que tenga su parte de razón, porque el canandiense desde luego no tiene una técnica pulcra y cuidada, pero lo suyo es otra cosa, es algo propio que sólo tiene él. Os dejo un vídeo donde (yo estaba allí, chavales) me dejó con la boca abierta.

Eddie Hazel. Si alguien todavía no conoce a Funkadelic no sé qué coño ha estado haciendo todos estos años. George Clinton, Funkadelic, Parliament... Asignatura obligatoria. Y en medio de todo ello el bueno de Eddie Hazel tocando la guitarra. Desde luego el punteo de "Maggot Brain" es una maravilla y a mí se me caen los lagrimones cada vez que lo oigo.

Trey Anastasio. Si usted conoce a Phish enhorabuena, es usted de los elegidos. De no ser así, póngase a ello YA. Desde luego, poca bandas más... más... más... bueno, póngase a ello y luego me cuenta.

Paul Kossoff. El chico la palmó con 26 tacos en pleno auge. Fue el guitarrista de esa maravilla llamada Free y no tenía nada, pero nada, que envidiarle a los fulanos de su generación. Ya sabe, Page, Blackmore, Clapton, aunque él era algo más joven.

Laurie Wisefield. Mire usted, reconoco que este señor es un poco menos conocido, aunque tocó en Wishbone Ash, palabras mayores. (Mire usted por dónde, ahí tenemos dos guitarritas, Powell y Turner, que tendrían que haber salido en esta lista). Lo que a mí me interesa de Wisefield es su banda anterior: Home (donde tocaba Cliff Williams el de AC/DC). Una delicatessen de las de chuparse las dedos.

Reeves Gabrels. Sólo diré una cosa, bueno dos: los dos discos que David Bowie grabó con Tin Machine.

Joe Mascis. Guarro como comer lentejas con las manos, pero con una gusto para la melodía increíble. Posiblemente todo lo que un buen Jebi pueda odiar. Hasta su guitarra (que a mí me parece una preciosidad) Fender Jazzmaster es la antítesis de lo que usarían los corremástiles aquellos.

©Don Críspulo