La teoría es preciosa, pero es de justicia reconocerlo: en la práctica, la realidad es que cada vez tardan menos en llegar a las grandes plataformas esos lanzamientos únicos que todo coleccionista debe tener, al tiempo que los precios continúan aumentando peligrosamente. El último grito, que diría mi abuela, parece ser el de lanzar un álbum en formato de doble vinilo a pesar de que no alcance los tres cuartos de hora. Así ha sucedido con la edición “limitada” del Meteora de Linkin Park y con You Hear Georgia, el último de Blackberry Smoke, porque está claro que la amplitud de los surcos, la calidad del prensaje y vaya usted a saber cuántas cosas más son fundamentales. Todo parece valer con tal de encarecer el producto final, porque ante todo, honestidad brutal: está claro que todos los que tenemos una copia del Rubber Soul nos lamentamos todos los días porque no saliese en doble vinilo, con la ilusión que nos hacía haber pagado el doble por él.
Hablando de discos, Billie Eilish sacará su segundo disco la semana que viene. Teniendo en cuenta lo que vendió su primer LP, la jugada era de manual: el nuevo se lanzará en edición de color, que queda divino en Instagram como todo el mundo sabe, y el precio superará los cuarenta euros. Una cantidad, por cierto, que rozaba el disco de tomas alternativas y demos del Déjà Vu de CSNY en el mencionado Record Store Day. Por no hablar de lo que costará la edición de lujo del All Things Must Pass, cuya reedición “normal” se venderá en torno a los setenta euros.
Las cifras no mienten y los datos nos dicen que el año pasado se vendieron en Estados Unidos 27,5 millones de vinilos, todavía a millones de años luz de comienzos de los 80, pero con un aumento evidente año tras año. La pregunta es sencilla; la respuesta, no: ¿hasta cuándo? Las matemáticas siempre se han apuntado a lo de no fallar, y en este caso las pruebas son claras, señoría: por el precio de un LP nuevo puedo conseguir tres o cuatro de segunda mano que me gustan tanto o más que el nuevo. Si esto es una estrategia de la industria para que se vuelvan a comprar CDs me quito el sombrero, pero si la tendencia continúa y en cinco años tenemos que soltar cincuenta euros por un vinilo nuevo entonces lo que me quito es la vida.
¿Están en peligro las tiendas de discos? Mientras haya bichos humanos sedientos de música como los hay y vendedores al pie del cañón que compartan nuestro amor por esto, entendiendo que lo de vender al ritmo de los 80 es utópico, yo diría que no. Puntualizo: lo que veo en claro peligro de extinción son iniciativas del palo del Black Friday, Record Store Day y demás movidas para que “apoyemos las tiendas de discos”, cuando en realidad la finalidad es otra bien distinta. Los que antes ponían el grito en el cielo porque grabar cintas acabaría sin remedio con la música son los mismos que ahora te justifican la subida de precios porque la inflación, la crisis del coronavirus y en definitiva las dimensiones de sus caras, que superan ampliamente las de sus espaldas.
Cuando el Record Store Day pase a mejor (o peor) vida y los culpables seamos los consumidores de música por no pagar 100 euros por un concierto de Mick Jagger en su primera comunión, nosotros seguiremos a lo nuestro: buceando en Nakasha, Escridiscos, Bajoelvolcán, Bangladesh y demás templos en busca de otro tesoro escondido particular.
Yo sigo comprando vinilo,pero no me busco tanto la vida que como cuando tenía veinte años,si quería algo y era caro,no lo pagaba,esperaba hasta que lo conseguía barato,de todas maneras me buscaba mucho la vida,incluso he recurrido a los yonkis del barrio para que me consiguieran ciertas cosas a precio de chiste
ResponderEliminarHe ido a las radios,en las cuales he conseguido toneladas de discos a precio de risa,un poco maltratados,pero conseguía cientos e incluso los vendía
Si no te importa el original y quieres una copia exacta,e incluso a veces mejor,ahórrate unos euros y viaja a Yugoslavia,el gobierno no cobra IVA a todo lo referente con la música y del pirateo pasan total,vendrás cargado,como hacía yo,con el coche a reventar
Consigo mucho con particulares americanos pero no en venta en intercambio,quieren ediciones españolas,y es un dulce que no se pueden resistir
A las mismas discográficas e ido a engatusarme a algún trabajador en el que me ha vendido discos promocionales que ni te imaginas,yo no soy tan exigente con esas cosas,que si promocional que si la edición que no se que,pero tengo todo lo que quiero y tengo una colección que vale una pasta,otra cosa es que de manera cómoda desde tu casa quieres conseguirlo barato,si te mueves y te buscas la vida y paciencia consigues lo que quieres y barato
En mis tiempos gane mucho dinero buscandome la vida con el vinilo
Podría contar Miles de anécdotas con ciertos vinilos y que los mayores coleccionista de vinilo del mundo son los japoneses
Todo el vinilo que no puedas conseguir esta en colecciones privadas japonesas