ZEPPELIN ROCK: Crítica de "Clerks" (Kevin Smith, 1994): review

miércoles, 6 de julio de 2016

Crítica de "Clerks" (Kevin Smith, 1994): review


por Möbius el Crononauta



Existen momentos que toda persona suele recordar, que si el primer beso, dónde compró el primer disco, dónde jugó al Monkey Island por primera vez... no sé, muchos momentos, algunos relevantes, otros realmente estúpidos. Por alguna razón, todavía recuerdo la primera vez que vi Clerks. Fue en casa de un colega del instituto: nos juntamos algunos colegas y aunque para ellos ya casi un ritual, para mí era la primera vez.

La primera era imagen ya resultaba chocante. ¿Qué era aquello? ¿Un perro alemán? ¿Mis amigos poniendo películas en blanco y negro? ¿Qué sería lo próximo? ¿Ponernos a estudiar para los exámenes?




Aunque tan pronto como Dante entra por la puerta de la tienda y llega el primer cliente, aquello comenzaba a oler a clásico. ¡Un representante de una compañía de chicles dando discursos anti-tabaco! ¡Diálogos sobre Star Wars! ¡Fumetas y fracasados! ¡El tipo del baño! ¡La discusión sobre las 37 pollas! Y por supuesto, novias, exnovias, amor, desamor... en fin, cosas con la que uno se podía identificar. Días de instituto, grunge, Alice In Chains en la banda sonora de aquella película... ciertamente Clerks era un film noble para tiempos más civilizados (¡imposible hablar de esta película sin hacer referencias a Star Wars!).

En fin, aquella era una película diferente. Un extraño producto que se convirtió en los Estados Unidos en el VHS más robado de todos los tiempos. ¡Sí, Clerks goza de ese dudoso honor! Me imagino a todos los Jays de los States llevándose la película bajo la chaqueta para reunirse con sus amigos y fumar unos cuantos viendo las andanzas del pobre Dante.





Todo en Clerks es peculiar e inusual, sobretodo para una cinta que llegó a alcanzar un éxito tan masivo. No estamos hablando de Roger Corman aquí. Para empezar, los derechos de la banda sonora costaron más que todo el rodaje del film. Supongo que Kevin Smith pensó que si no ponía tener buenos medios al menos tendría buena música.

Cuentan que mientras Kevin Smith y Scott Mosier acudían a la escuela de cine de Vancouver hicieron un pacto: el primero que se pusiera a dirigir tendría al otro como productor. Con el tiempo Smith presentó primero su proyecto, con lo que Mosier ha ejercido de productor en todos los films del regordete director de Jersey.

Obviamente, una producción tan barata tiene toda una historia detrás en cuanto a financiación. Kevin Smith fue sacando dinero de dónde pudo: amigos, familiares... la inyección definitiva fue un pago por el seguro de su coche. También se desprendió dolorosamente de su colección de cómics, el sacrificio definitivo. Con el dinero y un guión de 168 páginas, se juntó con amigos e hizo audiciones para los papeles y se dispuso a rodar. Clerks es una visión del mundo según Smith, y para ello se inspiró en el Infierno de Dante (no es casualidad que su personaje principal se llame así) para retratar un día infernal en la vida de un dependiente de una pequeña tienda. Y para ello nada mejor que rodar en la misma tienda dónde Kevin Smith trabajaba como dependiente. Así, tras cerrar cada noche, todo el equipo llegaba a la tienda para rodar todas las escenas que se pudieran. Por ello toda la película tiene una iluminación tan especial, y se utiliza como excusa unas bombillas rotas. El videoclub de al lado fue utilizado por Smith y Mosier para editar el film.






Slacker, una película de 1991, sirvió al parecer, de inspiración a Smith para la historia de Clerks. Aunque con el tiempo lo cierto es que en los diálogos del film veo, salvando las distancias, la sombra de Woody Allen, como si de pronto hubiera rejuvenecido 20 años, hubiera tirado su clarinete y se hubiera puesto a escuchar a Nirvana. Si lo pensáis no es tan descabellado. Al fin y al cabo Kevin Smith trata, en tono de comedia, de sus preocupaciones, de relaciones entre amigos y novias, amistad, amor, etc. Tal vez si Allen hubiera nacido en 1970 habría rodado un film como Clerks.

Una de las escenas que muchos recordamos con cariño es aquella en que Randal, el amigo de Dante que trabaja en el videoclub colindante encarga toda una seríe de títulos porno enfrente de una madre con su hija pequeña, que ha ido buscando una película infantil para su hija. El actor que interpretaba a Randal, Jeff Anderson, se negó a rodar la escena con la niña delante, con lo que en realidad la niña nunca llegó a estar allí.

Lista de films porno que Randal encarga por teléfono:

"Whispers in the Wind", "To Each His Own", "Put It Where It Doesn't Belong", "My Pipes Need Cleaning", "All Tit-Fucking Volume 8", "I Need Your Cock", "Ass-Worshipping Rim-Jobbers", "My Cunt Needs Shafts", "Cum Clean", "Cum-Gargling Naked Sluts", "Cum Buns III", "Cumming in Socks", "Cum On Eileen", "Huge Black Cocks and Pearly White Cum", "Girls Who Crave Cock", "Girls Who Crave Cunt", "Men Alone II: the KY Connection", "Pink Pussy Lips", and, uh, oh yeah, "All Holes Filled with Hard Cock". Si alguien adivina cuál era el título de la película que buscaba la madre para su niña le daré un premio al freak de la semana.

Por supuesto hablar de Clerks es hablar de Jay y Bob el Silencioso, personajes que son parte ya de la cultura popular. En un principio Smith escribió el personaje de Randal pensando interpretarlo él, pero finalmente se adjudicó el papel más pequeño de Bob, y que finalmente se ha hecho mucho más popular que el de Randal, claro que para eso escribe el propio Kevin Smith los guiones. Para el papel de Jay Smith eligió a su amigo Jason Mewes. Aunque las películas que las han seguido no siempre han conservado el espíritu de la original, Jay y Bob han permanecido más o menos fieles a esos dos losers que se pasan el día apoyados en la pared del Quickstop.

Lo que seguramente nunca habría esperado Kevin Smith es que el film fuera un éxito. Pero Clerks comenzó su andadura con un pase en el festival de Sundance, donde fue aclamada por crítica y público. Ello inevitablemente trajo el apoyo de Miramax, financiación para la banda sonora, más festivales, promoción... El boca a boca se fue extendiendo, y tras ser un éxito en Estados Unidos y Japón llegó a nuestros cines, y a las manos de mi amigo, y... en fin, el resto es historia.

1 comentario:

  1. yo tambien tuve ese momento,en el que recuerdo perfectamente cuando vi CLERKS,que partio todos los esquemas del cine independiente......la vi en canal plus en el videoclub no estaba pero en canal plus la dieron....un pasote que lo recuerdo como si fuera hoy.....tambien recuerdo quejarme que era en blanco y negro y enseguida los colegas decirme que esperara que la peli es muy buena......la verdad clerks es como un vinilo de música....algo que no se olvida

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