ZEPPELIN ROCK: Las canciones ideales para los títulos de crédito en el cine

domingo, 2 de marzo de 2014

Las canciones ideales para los títulos de crédito en el cine



por José Manuel Albelda (@jmalbelda)





Un secreto inconfesable: odio los créditos finales de cualquier película. Aunque los haya diseñado el mismísimo Saul Bass. Los créditos finales, he dicho, no los iniciales. Yo creo que he sido condicionado a dicha aversión por dos motivos: en primer lugar, por la falta de respeto con la que la mayoría de las salas de cine tratan al público al encender las luces antes de que la proyección haya finalizado; en segundo lugar, por la falta de respecto con la que los responsables de continuidad de las cadenas de televisión tratan al público al cortar a saco el final de la película nada más funde a negro y aparece el nombre del director. Para ver los créditos así, mejor no verlos. 

Dicho lo cual, desde los años 70 reconozcamos que los créditos finales son parte consustancial de cada obra fílmica, por lo que, condicionado yo o no, he de admitir que son insoslayables, sobre todo si están acompañados de un soundtrack perfecto. He aquí, pues, una lista con diez canciones que me ponen los pelos de punta; me haría muy feliz encontrármelas como si tal cosa al terminar una película redonda.


Diez canciones que me gustaría escuchar durante los créditos de una película:


“Lazarus”, de Porcupine Tree.
“The drugs don’t work”, de The Verve.
“Only one woman”, de The Marbles.
“The temple of the king”, de Rainbow.
“Sentimental song”, de Ultrasound.
“The end of the world”, de Blackfield.
“Beautiful”, de Marillon.
“The everlasting”, de Manic Street Preachers.
“A ghost in your heart”, de Bad English.
“The tide is turning”, de Roger Waters.

©José Manuel Albelda

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